MODELO DEL ICEBERG

Mente y cerebro como condicionantes de nuestra realidad
Diego Stancampiano

El modelo del Iceberg – Spencer & Spencer 1993, es una herramienta usada por la psicología clínica y social, y se implementa frecuentemente en diversas organizaciones humanas como las empresas, escuelas y universidades. Es la unión de conocimientos sobre la mente, el cerebro y los distintos tipos de inteligencias, aplicados al comportamiento humano. Es la forma en que los datos aportados por la neurociencia, se verifican en nuestra vida cotidiana.

Al igual que un iceberg tiene un 85 % de su estructura debajo del agua, una persona tiene la mayor parte de si oculta. Nuestros pensamientos y emociones están fuera del alcance de los demás y la mayoría de las veces, son ignorados hasta por nosotros mismos. No es solo que no se ven, es que, la mayoría de las veces, no se quieren ver, porque no se sabe cómo solucionar lo que allí habita. 

Si bien esta parte permanece oculta, es el origen y sostén de lo que se puede ver de nosotros: el comportamiento y los hábitos que determinan los RESULTADOS.

Cómo profesionales de la salud vemos el 15% de un paciente, cuando entra en la consulta: cómo entra, cómo está vestido, cómo habla, si te mira a los ojos, o baja la mirada, los hábitos y el comportamiento. Pero nunca debemos olvidar que ese 15% visible, obedece al 85% que permanece oculto.

Si adquirimos destrezas en conocer cómo funciona ese 85 % de emociones y pensamientos, nos será más fácil modificar positivamente el 15% de los resultados. Si pasamos esto por alto, el cambio será superficial y la situación se reconducirá al punto de partida.

En ese modelo del iceberg podemos decir que lo que está sumergido es el inconsciente que se expresa a través del CL (Cerebro límbico , es la parte del cerebro que genera y regula las emociones), y lo que se mantiene fuera del agua es el consciente que habla a través del CPF (Córtex Pre Frontal, donde se asienta la razón). El agua que rodea toda la parte sumergida de todos nuestros icebergs es el inconsciente colectivo que se asienta en el cerebro atávico, (donde están grabados los mecanismos de defensa y autopreservación).

Es por eso que, muchas personas caen en conductas ilógicas arrastradas por la marea de pensamientos, emociones, opiniones y comportamientos de los demás: se compran casas y coches que no necesitan, celebran fiestas sin saber su significado, se casan con personas equivocadas y tienen trabajos que no desean. Esta conducta inconsciente tiende a igualarse a la manada y no ser rechazado, comportamientos que se arrastran desde que estas partes del cerebro se desarrollaron.

La mente supraconsciente, es el aire que rodea al iceberg. Es la parte de nosotros que, mediante la observación de estos procesos, se da cuenta de ellos y los entiende, desmontando mecanismos obsoletos que nos hacen sufrir. Es la mente más desconocida y la que menos se utiliza. La Mente Superior o abstracta es donde habita justamente la Supraconsciencia, que es el “darse cuenta” de las cosas, darse cuenta de qué emoción tenemos, por qué estamos tan cansados, la razón del enojo, del miedo; y poder solucionarlo. Es la conciencia que sostiene:

¿Cómo mente y cerebro condicionan nuestra realidad?

Las Tres mentes y los Tres cerebros son los principales condicionantes de nuestra realidad, y su conocimiento es la llave para el éxito, individual y colectivo.

En el actual desarrollo del hombre el cerebro atávico se ha fundido y ha pasado a formar parte del límbico, razón por la cual me referiré solo a dos cerebros.

El CPF y el CL tienen tres parámetros que marcan las principales diferencias entre ellos. Ambos tienen:

  • Responsabilidad en un nivel de gestión.
  • Un mecanismo de ahorro energético.
  • Una química con neurohormonas y neurotransmisores específicos.

El CPF es responsable de la gestión del pensamiento, su mecanismo de ahorro de energía es el Automatismo a través de rutas y redes neuronales y su química se basa en el eje Dopamina – Adrenalina (más noradrenalina y cortisol), principales responsables del estrés o la depresión.

Por otra parte, el CL es responsable de la gestión de la emoción y la construcción de los sentimientos, su mecanismo de ahorro de energía es la distracción y la “promesa de placer” y su química se basa en el predominio del eje Serotonina/Melatonina, responsable del descanso y la salud física y mental.

Estas acciones de la mente a través del cerebro y la acción de los arquetipos o prejuicios mentales y emocionales condicionan todas las actividades del hombre, su desempeño y su resultado.

“El CEREBRO humano es el escenario donde MENTE y EMOCIONES libran su particular batalla”.

Diego Stancampiano

Continuará…

(Extracto del libro “Manejo del estrés en consulta, Neurociencia & Odontología, Diego Stancampiano. Atlantis Editorial Science & Technology S.L.L. 2019)

Compartir: